domingo, 28 de noviembre de 2010

La supremacía de Su Majestad

Llegó la hora de completar la trilogía de comparaciones entre el mundo del básquet y la novela 1984 de George Orwell. Y si se habla de trilogía es imposible no relacionarlo con Michael Jeffrey Jordan. No hay jugador más omnipresente, a la par que Gran Hermano en 1984, en la historia del básquet que Su Majestad.

Su talento ya era reconocido en todos los Estados Unidos mucho antes que sea elegido en la tercera posición del Draft de, casualmente, 1984 por Chicago Bulls. Durante su presencia en la NBA dividió a todos los aficionados al básquet en dos. Los fanáticos de los Bulls (Partido Único) que vivieron obnubilados por su figura durante los seis anillos de campeón que le dio a su franquicia, con un porcentaje de efectividad perfecto: seis finales disputadas, seis ganadas. Y por el otro lado una gran cantidad de equipos que vivieron totalmente aislados de triunfos (gente extremadamente pobre aislada de la política).

Pocos equipos se han animado seriamente a romper con su régimen “totalitario”, así como lo intentó Winston Smith en la novela. Utah Jazz, con la pareja Karl Malone y John Stockton, fue la franquicia que intentó dar el golpe en dos oportunidades: 96/97 y 97/98. Pero MJ y compañía se encargaron de torturarlos de una forma que nada tiene que envidiarle a la realizada por la policía del pensamiento sobre Smith en el Ministerio del Amor: Era el sexto partido de la final de la temporada 97/98 en Utah. Faltaban 40 segundos y Chicago perdía 86-83. Jordan anotó una bandeja ante varios defensores de los Jazz, colocando al equipo un punto abajo (86-85). En la nueva posesión de Utah, Malone recibió en el poste bajo, mientras era defendido por Rodman. Pero Jordan llegó por detrás y le robó el balón. Frenó el ataque sobre la línea de tres, con la defensa de Bryon Russell. Tras unos instantes picando tranquilamente el balón, Jordan se dispuso a atacar el aro, quitándose a Russell de encima con una finta que lo mandó unos metros para atrás y le dio fama eterna. Jordan, sin defensa alguna, lanzó y anotó el doble que le dio la victoria y el título a Chicago. Sería su última conversión con la roja de los Bulls. De esta forma Utah, al igual que sus otros rivales en finales: Los Ángeles Lakeres (90/91), Portland Trail Blazers (91/92), Phoenix Suns (92/93) y Seattle SuperSonics (95/96), que al igual que Winston terminaron aceptando y admirando lo que dice el Gran Hermano o MJ.


El Gran Hermano suple a todo personaje político y Air Jordan traspasó todas las fronteras y es más que un simple jugador de básquet. Incluso muchos, obnubilados por sus actuaciones dentro de una cancha, han pensado que Michael Jordan no es una persona real, tal como lo insinúa Orwell en su novela.

lunes, 22 de noviembre de 2010

Obras, entre Peña y el resto

La LNB presenta a un Peñarol que continua con la base de años anteriores y se muestra notoriamente un escalón por encima que cualquier equipo de la Liga. Pero Obras ha logrado posicionarse por plantel, por juego y por resultados entre el equipo marplatense y arriba el resto. Inclusive El Tachero lidera la zona sur con 10 victorias y 2 derrotas, y el conjunto de Sergio Hernández lo sigue muy de cerca pero con un partido menos: 10 ganados y 1 perdido.

Luego de una pésima temporada 2009/10 (muchas lesiones, diferencias entre el plantel y entrenador, continuos cambios de extranjeros, contratación del Loco Montenegro, llegada a mitad de temporada de Pepe Sánchez), la dirigencia de Obras se planteó realizar borrón y cuenta nueva y contrató al prestigioso entrenador Julio Lamas para que encabece el proyecto. Su designación fue clave para que distintos jugadores se sumen al proyecto. Recién llegado del Mundial de Turquía en donde se revalorizó notoriamente Junior Cequeira le contaba a 23showtime: “Partiendo de la base de traer un entrenador como Julio Lamas quiere decir que las cosas se van a hacer seriamente”. Y agregaba: “Sería lindo ver que a medida que va pasando la Liga el equipo se mantenga arriba y meternos en los más alto posible”. Objetivo totalmente cumplido.

Julio Lamas

jueves, 18 de noviembre de 2010

Pastillas con poco de básquet

  • El libro The Undisputed Guide to Pro Basketball History, editado en los Estados Unidos, ofrece unas originales láminas en las que se resume parte de la historia de la NBA. Les presentamos algunas:




  • Siempre aparece Shaq con un nuevo modelo de este tipo de videos. En esta oportunidad el pivot de Boston Celtics se fue al legendario bar 'Cheers' de dicha ciudad, el mismo que inspiró la famosa serie televisiva,  y se puso a entonar el conocido tema con el que empezaba la serie. Y como siempre lo subió a su Twitter.


  • Parece que la tiene complicada Tony Parker. Su mujer Eva Longoria, protagonista de "Amas de casa desesperadas" presentó una demanda de divorcio alegando "motivos irreconciliables". La noticia es de hace unos días, pero el nuevo rumor es que al parecer el base de los San Antonio Spurs había sido infiel con la esposa de un compañero de equipo.... Se trata de Erin Barry, ex mujer del escolta  retirado Brent Barry.
Parker, Longoria, Erin y Barry en sus tiempos felices


martes, 16 de noviembre de 2010

Una poderosa victoria

Esta es la primera vez en esta sección (peliculas/básquet) que presentamos una película que todavía no ha sido presentado en los cines argentinos (se duda que lo haga). Se trata de Una poderosa victoria o The Mighty Macs, basada en la vida real de la entrenadora Cathy Rush.

Rush, interpretada por Carla Gugino, busca su última oportunidad de alcanzar su sueño de ser entrenadora de básquet en la Universidad Inmaculada de Malvern, Pennsylvania. Una universidad católica exclusiva para mujeres y administrada por monjas. Cathy logra el puesto aprovechando las pocas postulantes y así llega acordar con la madre superiora cobrar 450 dólares por entrenar al equipo de básquet. Allí tiene lugar el mejor diálogo de la película:
-Espero que sea mejor entrenando que negociando
-Por qué?
-Estaba dispuesta a ofrecerle $500
-Esta bien, porque yo estaba dispuesta a entrenarlas gratis

Rush debe luchar con la poca importancia que le brindan las monjas al deportes, ya que solo lo utilizan para "distraer las hormonas de las alumnas". Tampoco las jugadoras se estaban comprometidas con el equipo, ya que, pese a transcurrir en 1972, el ambiente que las rodea las lleva a que su único sueño sea casarse y formar una familia.

Lentamente Rush logra motivar y comprometer a sus jugadoras y hasta logra conseguir que todas las monjas se identifiquen con el equipo y lo alienten en cada partido rumbo al objetivo que es clasificar al torneo nacional. Objetivo que cumplen debido a que obtienen el torneo en 1972.
Cathy Rush y Carla Gugino durante el rodaje

Hasta allí llega la película, pero la vida de Cathy Rush continua con la obtención de los campeonatos nacionales de 1973 y 1974, en 1975 dirije a la selección femenina de Estados Unidos en los Juegos Panamericanos de Ciudad de México (obtiene el oro) y en 2008 ingresó, junto a Olajuwon y Ewing, al Salón de la Fama de baloncesto. Actualmente reparte su tiempo en numerosas y variadas actividades: es presidente del Futuras Estrellas Camp (campamento de deportes y arte), brinda charlas de motivación, es comentarista de numerosas cadenas de televisión y, al ser sobreviviente del cancer de mama, es portavoz de la Sociedad Americana del Cáncer.


FICHA:
Una poderosa victoria

Director:Tim Chambers
Guión: Tim Chambers, Whitney Springer
Protagonistas: Carla Gugino, David Boreanaz, Ellen Burstyn, Marley Shelton
Año: 2009
País: Estados Unidos

domingo, 14 de noviembre de 2010

"El básquet nace en la Argentina como un deporte concheto"

Emilio Guitiérrez es una auténtico fanático del básquet. Solo basta ver el piso de parqué decorado con un escudo de los Boston Celtics, su equipo en la NBA, en su oficina, para comprobarlo. Además es ex-jugador y actualmente dirige los juveniles de HACOAJ. También, aprovechando su profesión como sociólogo, realizó numerosos trabajos relacionados con el básquet nacional. Por todo esto nos pareció interesante charlar con él sobre los inicios del básquet en la Argentina... 

¿Cómo comenzó el básquet en la Argentina?
El básquet nace en la YMCA que es la Asociación Cristiana de Jóvenes. James Naismith (profesor canadiense) crea el básquet en los Estados Unidos y se expande rápidamente. Porque con una pelota y un tablero juegan muchos jugadores y además es para salón, no necesitas mucho terreno y es para invierno. Entonces se expande muy rápido, sobre todo en sociedades urbanas que se trabaja mucho y la gente tenía que descontracturarse. El básquet nació gracias al aburrimiento de los pibes que estaban casados de hacer gimnasia, entonces necesitaban algo divertido dentro de un gimnasio. Eso es especial para las clases acomodadas de Buenos Aires. El básquet nace en la Argentina como un deporte concheto, de estirpe. Por ejemplo, el actual equipo de rugby Hindú fue 5 años consecutivos campeón del básquet argentino.

¿Cómo se logró la expansión?
Primero explotó dentro de la YNCA como si fuera una cosa masiva pero dentro de una asociación. Hasta que vino un tipo como Federico Williams Dickens, que es el padre del deporte argentino, y les dijo que salgan afuera a fundar clubes porque esto está para otra cosa. Y le hicieron caso. Y los primeros clubes no fueron populares. Eran empresas, algunos clubes como Racing, Regatas de Avellaneda y muchos clubes que hoy son de rugby. Esa primera federación se fundó con el nombre FAB (Federación Argentina de Basquetbol) y suscribía al código del aficionado.


¿Cuál fue el primer torneo que se organizó?
Y en el interior se empieza a desparramar porque la YMCA tiene muchas instituciones similares en el resto del país. Hacen el primer Campeonato Argentino, compuesto por Capital, Buenos Aires, Bahía Blanca y Córdoba.  Y se crea la CABB (Confederación Argentina de Basquetbol). Ahí ya empieza la primera división: capital e interior. La FAB argumentaba tener la representación de Argentina y la CABB empieza a luchar para que haya una organización internacional como después fue la FIBA. El básquet ya era muy popular, ya éramos Campeones Sudamericanos y ya no era tan concheto.

Emilio Guitierrez 2 by dario doallo


viernes, 12 de noviembre de 2010

El día que Bill Russell jugó en la Argentina

El blogdelanba publicó un buen perfil de la carrera de Bill Russell, pero como bien lo dice el nombre del blog se dedicó exclusivamente a su etapa como pivot de los Boston Celtics en la NBA, en donde ganó ¡11! anillos de campeón. Evitando así su glorioso paso por la Uiversidad de San Francisco, que incluye un paso por la Argentina.

William Fenton Russell consiguió tres campeonatos con el Instituto McClymonds, lo que llevó a que la Universidad de San Francisco le otorgara una beca deportiva. Allí compartia equipo con Hal Perry y K.C. Jones (también jugó en los Celtics y ganó 8 títulos), ambos de raza negra. Y los tres sufrían numerosos insultos racistas tanto en la USF como en cualquier otra ciudad. Sin embargo, el mayor echo de discriminación lo sufrieron en Oklahoma City cuando fueron a disputar el All-College de 1954. Allí todos los hoteles de la ciudad se negaron a hospedarlos, obligándolos a parar en una residencia universitaria cerrada. Tiempo despúes "The Hawk" explicó que estos acontecimientos le sirvieron para fortalezer su personalidad: "Nunca me permití ser una víctima".
Durante su carrera universitaria obtuvo dos campeonatos de la NCAA (1955 y 1956) y promedió 20,7 puntos y 20,3 rebotes en 79 encuentros. Su superioridad debajo del aro era tal que obligó a la NCAA ha modificar un par de reglas: se decidió ensanchar la línea de tiros libres de seis a doce pies, lo que obligaba a los pívots a jugar más lejos de canasta y se convirtió en ilegal tocar el balón cuando éste se encuentra en trayectoria descendente a canasta. Ambas modificaciones se conocieron como las "Reglas de Russell".

Pero fue en julio de 1956 que el mejor pivot de la historia pisó suelo argentino. Motivamos por el buen básquet que había en la Argentina por aquel entonces, la Universidad de San Francisco decidió venir a jugar al Luna Park con todas sus figuras, incluidas Russell. Justo en ese momento, los mejores jugadores argentinos estaban por ser suspendidos por considerarlos "profesionales", mote que guardaba muchos intereses por detrás (ya explicado en anterior posteo). Con la meta que Argentina no concurra a los Juegos Olímpicos de Melbourne, a disputarse en noviembre, los propios dirigentes del básquet decidieron no armar una selección nacional y dejaron que la Federación Argentina de Básquet (FAB), "los celestes", y la Asociación de Buenos Aires (ABA), "los blancos", presenten su equipo para disputar los numerosos amistosos de nivel en ese año. Con la intención que ambos equipos no obtengan resultados positivos y así no recibir críticas cuando se confirme que la Argentina no será representada en básquet en los JJ.OO.

Única foto de Bill Russell en la Argentina


Es por eso que el equipo "celeste" de la Confederación enfrentó a la USF, cuya actuación fue descrita por un periodista de la época como "eficaz pero sin deslumbrar". Como casi siempre la actuación de Bill mereció un comentario aparte: "La acción de Russell, jugador de extraordinaria eficacia como scorer, concentra el interés del público. Sin embargo, su tarea luce más, en esta ocasión, en el aspecto defensivo".

Pese a pasar por pocos centímetros los 1,8 metros de altura, Ricardo González fue el encargado de marcar aquella noche al pivot de 2,06. "Lo recuerdo como un gran jugador. A mí me tocó marcarlo porque yo aconstumbraba a marcar a los centro porque saltaba mucho. Pero era muy alto y con brazos muy largos", recuerda el campeón mundial en 1950. Y agrega: "Se les podía jugar. Nosotros teníamos una buena marca, que consistía en formar un triángulo debajo del aro". Pese a todos estos intentos, la USF se terminó imponiendo por 63 a 51.

Pero la anécdota entre "El Negro" y "The Hawk" no termina ahí porque 53 años después, en 2009, González viaja a Alcobendas, Madrid para oficializar su ingreso al Salón de la Fama FIBA y en esa misma camada estaba Oscar Robertson (medalla dorada en Roma 56` y campeón de la NBA con Milwaukee en 1971), quien es muy amigo de Russell, ya había ingresado en 2007, y al que invitó a la premiación. Allí tuvo un encuentro con González y un periodista oficializó de intermediario para comentarle que él lo había marcado y le preguntó si se acordaba del partido. A lo que Russell contestó: "Sí me acuerdo, pero más me acuerdo de tus codazos".

martes, 9 de noviembre de 2010

Pastillas con poco de básquet

  • Shaq salió de joda en la noche de Halloween. Se vistió de mujer y de plus comenzó a interpretar una canción de Beyonce. Una Beyonce de 2.16 metros y 150 kilos. El vídeo no tiene nada de desperdicio...
  • Esta no la teníamos, pero parece que viene hace tiempo. El alero de los Lakers Sasha Vujacic se comprometió con la tenista ex número 1 María Sharapova. "Estamos comprometidos y muy felices. Eso es bueno y ahora podemos concentrarnos en otras cosas", comentó el esloveno. Además contó que el ofrecimiento fue chapado a la antigua: "Fue a la antigua usanza. Tenía que hacerlo como caballero".

  • El escolta de Denver Nuggest J.R.Smith parece que disfrutó sus vacaciones antes del inicio de la temporada NBA. En esta oportunidad consiguió que !18¡ mujeres lo acompañen dentro de una limusina. Y rápidamente subió las fotos a su facebook...

domingo, 7 de noviembre de 2010

Semi-Pro

Resulta curioso es que un mismo actor interprete en dos películas distintas a un atleta del mismo deporte. Se trata de Woody Harrelson, que se pone por segunda vez en la piel de un basquetbolista.

En 1992, con el estreno de White men can’t jump (traducida como Los blancos no la saben meter o Los blancos no saben saltar), se puso en la piel de Billy Hoyle, un jugador callejero estadounidense. Ahora, dieciséis años más tarde, Harrelson es Ed Monix, un jugador de los Flint Michigan Tropics de la American Basketball Association (ABA). Sin embargo, ambas peliculas y la actuación de Woody resultan incomparables. Si alguien espera ver algo de la excelente White men can´t jump se verá absolutamente decepcionado.

El título de la película es Semi-pro y el protagonista de la película es el comediante Will Ferrelll. Ferrell es Jackie Moon, dueño, promotor y uno de los jugadores de los Tropics. Además de basquetbolista, Moon tuvo un gran éxito discográfico con la canción “Love Me Sexy”, que interpreta en cada partido de su equipo. Los Flint Michigan Tropics son uno de los peores equipos de la ABA (una liga de segundo nivel), con escasos seguidores. Su único buen jugador es Clarence Coffee Black (André Benjamin).

La situación de los Tropics se complica cuando el comisionado de la liga (interpretado por David Koechner) anuncia una fusión entre la ABA y la NBA que sólo dejará a los cuatro mejores equipos en competencia. El equipo de Moon termina sumando a un nuevo jugador (el nombrado Monix), quien llega de un equipo ganador pero donde se la pasó sentado en la banca. Los Tropics buscarán por todos los caminos llegar a la NBA.

La sinopsis resulta interesante pero la pelicula no cumple para nada las espectativas. Resulta una comedia con pocas luces en donde se reduce a chistes básicos y el básquet pasa desapercibido.

FICHA:
Semi-pro
PAIS: Estados Unidos
DIRECCION: Kent Alterman
GUION: Scot Armstrong
ACTORES: Will Ferrell, Woody Harrelson, André Benjamin, Maura Tierney, DeRay Davis, Josh Braaten, Jackie Earle Haley, Jay Phillips, Peter Cornell.
GENERO: Comedia
ESTRENO: 29 de febrero de 2008 (Estados Unidos)


sábado, 6 de noviembre de 2010

Genocio Deportivo

Apenas la Revolución Libertadora toma el poder en el país forma una comisión que tenía como fin investigar todo lo relacionado al peronismo. La 1 tenía que ver con los sindicatos, la 2 con los Ministerios. Así hasta llegar al 49, que investigaba al deporte. “Con ese número te están diciendo que no les interesa el deporte. Si lo pones en el escalón 49, mucho interés por el deporte no tenes”, explica el sociólogo y entrenador de básquet Emilio Gutiérrez. Esta Comisión no tardó en ponerse a trabajar y citó a los campeones mundiales de 1950: “De mi consideración: Solicito de usted tenga a bien concurrir a la sede de esta Comisión Investigativa sita en la calle Carlos Pellegrini Nº 1362 de esta Capital el día viernes 27 del corriente a las 17:00 horas a efectos de prestar declaración. Sin otro particular, lo saludo atentamente, Julio M. Tramonti Burgos (vocal)”.

Paradójicamente, los interrogatorios en donde Monza reconoce que la pasó “muy mal”, se realizaron en el lugar que Perón le había dado al básquet nacional, en plena euforia post Mundial y por pedido del entrenador Canavesi, para discutir sus cosas. “Nos preguntaron porque habíamos desfilado con corbata negra en Helsinki 1952 y les dijimos que toda la delegación desfiló así y que se debía a la muerte de la esposa del presidente. Era lógico. Después nos preguntaron que habíamos traído de Europa. Cosas estúpidas”, recuerda el capitán del equipo Ricardo González.

El tiempo pasaba y las investigaciones en todos los ámbitos continuaban y lentamente se daban cuenta que iban a caer muchos mas de los que ellos pensaban. No iban a caer solo peronistas, sino también muchos que estaban ahora con la Libertadora. Por lo tanto, no iban a perseguir a amigos. Entonces se decidió poner punto final a la Comisión. Pero los dirigentes de la Confederación Argentina de Básquet se encargaron que ninguno se salvara. “Perón había dejado de lado a todos los dirigentes de básquet. La organización del equipo del Mundial la dejó en manos del mejor jugador, Furlong, y el mejor entrenador, Canavesi. Encima a todos los jugadores le dio la orden de importan un coche, no solo a los del mundial sino también a los equipos que hicieron buenas giras por Europa, y también les daba a los médicos, kinesiólogos y utileros. ` ¿A quien no les daba?´: a los dirigentes”, relata Gutiérrez.

Y los suspendieron de por vida basándose en el, viejo y empolvado, Código del Aficionado, creado en una regata de 1860 en Londres, con el fin que los hombre que tenían plata y tiempo no compartan su práctica social con los pobres. Cabe destacar que la mayoría de los campeones mundiales respetaba este código, ya que con la posibilidad de ir a jugar a la Asociación de Buenos Aires (fundada por los clubes de fútbol que no respetaban el código) decidieron continuar jugando en sus clubes.

“La sanción salió de la Confederación, habrá sido con la recomendación del Gobierno de turno, pero el que tomó la bandera y nos sancionó a todos fue la Confederación. En donde había dirigentes que habían estado festejando con nosotros en el Mundial. Nos querían castigar y nos castigaron”, comenta González. Y Monza agrega: “Al básquet nunca le perdonaron que haya salido campeón del mundo”. Finalmente fueron 35 jugadores los sancionados. Perdonándolos diez años después, cuando ya era tarde para todos.

Destruir llevó tan solo unos segundos y volver a tener un equipo argentino de primer nivel mundial, 50 años. Sin embargo, todavía y difícilmente se logré en pocos años, no se ha podido recuperar la popularidad y atracción que tenía el básquet en aquellos años. “Se perdió la camada, por mucho tiempo no se compitió por nada. Se corto con todo. A todo el deporte argentino lo volvió a retrazar, sobre todo al básquet”, concluye González, quien a 60 años no se olvida de su capitanía y tiene pensado ir a buscar a Claudio Morresi –Secretario de Deportes de la Nación- a la puerta del Cenard y pedirle una ayuda para sus compañeros: “Yo tengo suerte que laburo, pero el Chino, Uder, El Negro Busto, Canavesi, no tienen nada".

miércoles, 3 de noviembre de 2010

A 60 años: lo que se dice un equipo

Uno de los aspectos más importantes para lograr que un equipo triunfe es consolidar la “unión del grupo”. Y los campeones del primer y único mundial en la historia del básquet nacional en 1950 han dado muestras de ello. Y lo continúan haciendo aún hoy reuniéndose, muchos de ellos, los días miércoles a comer. Y lo harán también hoy, a 60 años exactos del triunfo por 64-50 frente a Estados Unidos en la final.

La sede es el restaurante “El Negro” del Club Palermo, en donde el base del equipo campeón Ricardo González es presidente honorífico e ídolo. El Negro pasa gran parte del día en el club, lugar que considera su “segunda casa” y donde es reconocido por todos. Pese a no tener actualmente un cargo formal en el club, se lo puede ver constantemente dando indicaciones a los empleados. “Esas flores hay que ponerlas urgente en los canteros. No importa si el domingo vienen los pibes y las rompen”, ordena el integrante del salón de la fama FIBA.

Otro participante habitual a las cenas, es Omar Monza. El elero cada vez se le complica más la movilidad debido a que posee dos prótesis en las rodillas, producto de jugar en piso de cemento y con zapatillas de lona, sin embargo, no le imposibilitan llegar al restaurante del primer piso, ya que el club cuenta con un ascensor de carga. Pocos en Palermo saben que Monza fue uno de sus principales verdugos en aquellas míticas finales de los años 50`, cuando vestía la camiseta de Parque. “De esta cancha tengo un feo recuerdo. En un partido frente a Palermo me empujaron y caí contra la gente. Golpeé con algo y mira como me quedó el dedo”, cuenta Monza, mientras muestra el meñique izquierdo doblado.

El último integrante es Ignacio Poletti, quien fue el encargado de pasar a buscar a Monza por su casa. Es el más joven de los tres y es unos de los pocos del interior que formaron el equipo. “En el Mundial era muy joven, por eso me toco jugar poco. Yo venía del interior y lo que viví en la final fue único, sorprendente. No me lo olvido más”. Es el más callado de los tres y prefiere escuchar a sus compañeros, pero al ser consultarlo por material fotográfico del Mundial dispara: “Por eso preguntale al Negro o a Monza. Yo en esa época estaba solo en Capital y me dedique a la joda”.


Comenzada la cena, las anécdotas vuelven a aparecer. “En la final, nosotros queríamos jugar con la pelota de la época y los yanquis con una similar a la actual. Así que se resolvió jugar un tiempo con cada uno. Igual les ganamos los dos”, recuerda con una sonrisa González, a quien es común ver mostrando, con una memoria envidiable, las fotos y trofeos que adornan el restaurante y la oficina del club.

“El encuentro con Perón después del Mundial fue tremendo. Muy pocos éramos peronistas, pero al salir de ahí por el carisma del tipo salimos todos peronistas”, explica Monza, quien en esa época se encontraba cumpliendo servicio en Aeronáutica y Perón le otorgó la baja en reconocimiento. Y González agrega: “Lo más importante fue lo que nos dijo Perón: `A mi no me preocupan las ideas políticas que tengan. Lo que ustedes acaban de hacer por la Argentina es mejor que el trabajo de cien embajadores”. Por su parte, Poletti prefiere destacar la buena conformación que hizo el entrenador Canavesi: “El mix que se formo entre el talento de los jugadores de capital y la fuerza y rudeza de los del interior fue la clave para ganar”.

Un tema que no tienen problemas en contestar si se lo preguntan, pero prefieren evitar en sus habituales charlas, es la absurda suspensión de por vida que sufrieron en 1956 por considerarlos profesionales. Sin embargo, es un tema que no hay que olvidar y el próximo posteo se dedicará al “genocidio deportivo” que sufrieron estos jugadores y que afectó notablemente a todo el básquet nacional.
Partido final: Argentina 64-Estados Unidos 50Fecha: 3 de noviembre de 1950.
Argentina (64): Viau 2, González 7, Uder 1, Furlong 20 y Contarbio 8 (fi) Bustos 1, Del Vecchio 14, Pérez Varela 4, Menini 7, Monza 0 y López 0. Entrenador: J. Canavesi.
EE.UU. (50): Slocum 8, Langdom 6, Stanich 11, Reese 3, Kahler 5, Metzger 3, Parks 2, Jaquet 2, Fisher 0, Haffley 6 y Williams 4. Entrenador: Gordon Carpenter.
Primer tiempo: Argentina 34-24. Estadio: Luna Park.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Buen arranque de los argentinos en la NBA

En solo una semana del inicio de la temporada 2010/11 de la NBA se pudo observar que los cinco argentinos presentes van a tener un año de muchos minutos y responsabilidades. Hecho que quedó demostrado en el segundo día de competencia (miércoles 27/10), cuando a Ginóbili, Scola, Delfino, Oberto y Nocioni les tocó jugar en la misma jornada y juntos lograron 90 puntos y 32 rebotes en 140 minutos. Quedando muy cerca de lo conseguido el 7 de diciembre de 2007, cuando, junto a Walter Herrmann, sumaron 96 tantos y 28 rebotes, en 157 minutos.

"No es una casualidad que logremos tanto protagonismo. Está claro que tenemos un lugar bien ganado. Algunos con mayor trascendencia, otros cumpliendo roles específicos, pero se nota la presencia. Ninguno tiene el puesto regalado, todos llegamos por nuestros méritos y hay que resaltar que Manu y Luis (por Ginóbili y Scola) están una cabeza arriba nuestro", afirmó al respecto el Chapu Nocioni.

El más afianzado, sin duda, es Manu Ginóbili, quien se preparó para su séptima temporada con la ilusión de regresar a los Spurs a los primeros planos. Y arrancó con una buena actuación en la victoria por 122-109 ante Indiana: 22 puntos (5 de 9 en triples), a solo un tanto de Tim Duncan, goleador del partido. En el segundo partido, Manu si fue goleador de los Spurs (marcó 23) pero no pudo evitar la derrota por 99-90 ante los New Orleans Hornets (llevan 3 juegos invictos, con un Chris Paul intratable). Entre los dos encuentros, Manu promedia 32 minutos de juego, demostrando que las lesiones son cosas del pasado y su protagonismo en el equipo es indiscutible.

Luis Scola continúa con los números estadísticos del Mundial de Turquía, lo que marca un inicio impresionante en lo personal. Acumula 27.3 puntos de promedio (18, 36, 28 ante Lakers, Golden State y Denver, respectivamente), 14 rebotes, lo que lo convierten en el mejor de los Houston Rockets en ambos rubros. Sin embargo, en los resultados – lo que más le importa a Luifa- su equipo comenzó con el pie izquierdo y acumula 3 derrotas.

Por su parte, Carlo Delfino continua reafirmando todo lo bueno echo en el campeonato pasado y su entrenador, Scott Skiles, le devuelve la confianza dándole muchos minutos de juego: en tres partidos promedia 36.7, solo por debajo de Brandon Jennings (38.7). Milwaukee comenzó con dos derrotas frente a New Orleans (85-96) y Minnesota (85-96). Pero la actuación del Lancha con 23 puntos, 3 rebotes y 3 asistencias fue crucial para que los Bucks consigan su primera victoria ante los Charlotte Bobcats por 98-88.


Philadelphia 76ers continua sin triunfos en 3 partidos (Miami, Atlanta e Indiana). Andrés Nocioni ha jugado muchos minutos (27), pero lo más importante es que recibió la confianza del DT para jugar la última bola ante los Hanks. Con el marcador 104-101, Chapu intentó un triple que fue tapado por Josh Smith, figura del encuentro. “Con mi tarea estoy contento, no desentoné, me falta conocerme más con los compañeros y terminar de tomar ritmo después de lo del tobillo. Estoy en un 80%", señalo Nocioni.

Por último, Fabricio Oberto y los sorprendentes Portland Blazers. La franquicia es líder en el oeste con 3 triunfos y ninguna derrota, con un Brandon Roy es un extraordinario nivel. El oriundo de las Varillas debutó, a solo 24 horas de haber arribado al equipo, frente a Phoenix Suns 98-88. Aunque continua sin mirar mucho al aro rival, lo mas destacado en Oberto es que ha visto aumentar sus minutos en cancha en forma progresiva (3 minutos en el debut, 11 frente a los Clippers y 17 ante los Knicks), algo verdaderamente positivo teniendo en cuenta que mientras esperaba en Córdoba por algún ofrecimiento solo entrenaba en el gimnasio y muy poco dentro de una cancha.